domingo, 9 de diciembre de 2012

UN LAXANTE ESPIRITUAL

Rosa de mi jardín. ¿De dónde sale? ¿Adónde va?

Olvidemos por un momento las creencias: 
Vamos a ejercitar una espiritualidad y reflexión libres. Usemos la razón unida a la "fuga mental", liberadas de conceptos que encadenan. Olvidemos por un momento el budismo, el cristianismo, cualquier creencia o "ismo", las búsquedas trascendentes y los horizontes ciertos o inciertos.
¿Y si el mal y el bien, a pesar de existir como 
elementos o "mónadas" culturales... no significan nada? Decir "nada" es manifestar que son solo nominaciones, es decir, nombres que definen pura ignorancia envuelta en la nebulosa del aferramiento existencial. Olvida los dioses y los "no dioses", traspasa tus emociones y deseos para elevarte sobre la atalaya de lo incierto. ¡Observa! Solo observa. 
Pon en tu mente a Buda, a Hitler, a Cristo o a Charles Manson.
¿Quien da sentido a tan dispares personajes? ¿Quien da sentido a tus ideas y juicios? ¿Que sientes ahora mismo? ¿Es acaso una herejía proponerte este ejercicio de libertad personal? ¿Cuales son tus limitaciones de fe?
¿Dónde radica el sentido de lo que "debe ser", de lo trascendente? ¿Y si no hay sentido alguno? El caos... vale, pero, ¿dónde nace el caos? Un agujero negro, un simple electrón... ¿son "buenos o malos"? ¿Para que "sirven"? 
¿Para que "sirves" tu? Anda, piensa que lugar ocupas en la "Gran Mente de la Creación - Evolución". 
Liberarnos de la inteligencia para alcanzar la Sabiduría, ¡menuda paradoja! ¿No es cierto? Por lo menos eso sugiere el zen. ¿Hacia donde nos lleva ese reduccionismo psicológico?
Bien, de acuerdo, regresemos a nuestro mundo de "sólidas" creencias. Dejémonos acariciar por la túnica azafrán o la cruz de madera que nos ofrecen consuelo y sentido. O galardona tu ego con la medalla del ateísmo liberador, "religiosamente dogmático" en el fondo. ¿Es acaso una herejía? ¿Un atentado a tu concepto de lo que "debe ser"? Entonces... ¿por qué te cuesta realizar este sano ejercicio? 
Yo lo considero un enema o "lavativa espiritual" que refuerza la libertad interior. Nos hace más valientes y tolerantes. Ya veis, no he nombrado versículos, ni sutras, ni suras. No. 
Para ser libres hay que despojarnos de "nominaciones", así, si creemos en lo que sea, será "de verdad", con plena coherencia. 
Yo me siento así más plenamente sacerdote, yogui, consciencia pura... y todo eso, insubstanciales en sí mismos, convergen en el Uno. Un Vacío que es Todo: Dios (a mi entender). 
No dejes nunca de practicar de vez en cuando este ejercicio, quizá te haga (nos haga) más humildes y tolerantes. 
Recuerda: La arrogancia es el disfraz que utiliza el ego que nos impide desnudarnos de conceptos y actitudes preconcebidas. 
Y el miedo es el "cemento" que nos aferra a comportamientos que nos esclavizan; en el "samsara", en el "infierno"... que más da. 
Vive y sé valiente. "Mata a tus dioses" para "resucitar" inmaculado y sin ceguera ilusoria. 
Si tienes miedo a perder la fe... es que no la tienes.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, yo no tengo miedo a perder la Fe, Tengo Fé, en alguien amoroso, divino, da igual sea masculino, femenino, cristiano, budista, de mahoma, energía. etc...

Es una buena reflexión. Para que sirvo. Me lo pregunto y analizo muchas veces. Muy bueno el Título.
abrazo. gracias.

Crispín dijo...

¿Cómo vencerme a mí mismo?¿Cómo superar mis miedos? No soy capaz de pensar en esas personas (nombras a Hitler, pero hoy sigue habiendo gente así) que han causado y causan tantó sufrimiento sin que sienta los gritos de sus víctimas corriendo por mi columna. Cuando pienso en tanta sinrazón me entran escalofrios, y tú me dices, querido maestro, que es posible y/o necesario verlos sin involucrarme. No sé, pienso que tengo que estudiar más para verle el sentido.
¡Cuanta ignorancia que disipar! ¡Cuantas cortinas por descorrer!

Jayja para tí... dijo...

me falta tanto...doy cada día de mi vida un paso de añoranza para lograrlo, pero aún no llego hasta ahí... a veces ya menos soy un volcán... un saludo amigo