Vamos hombre, sonríe. Venga, un poquito, ahora, "porfa". ¡Genial! Aunque sea un solo músculo facial ya es algo. Te harás feliz, nos harás feliz. Regalarás sonrisas a cambio que son un tesoro poco valorado.
Hoy entré en las galerías comerciales donde tengo mi local de yoga tibetano y saludé a un "ejecutivo" trajeado que salía del ascensor. Silencio a cambio. Volví a saludarle y siguió su camino mirando al frente, rictus serio y paso firme. En fin, yo hice lo que mi corazón me dictó. Al llegar al local pedí por él en la meditación. ¡Cuánto dolor debe albergar dentro cuando no devuelve el saludo con un simple "buenas tardes"! Queridos amigos, sonreid siempre y sed amables: "buenos días", "es usted tan amable", "gracias", "le deseo lo mejor", "que tenga un buen día"... Lo que importa es la intención en lo que dices, no la respuesta que recibes.
10 comentarios:
Hola Javier: me alegra estes, ya con mas tiempo. Totalmente de acuerdo contigo.
Un abrazo.
Siii! A ponerlo en práctica! Ja, ja, ja! Un fuerte abrazo!
Gracias Luzysolyluna.
Un fuerte abrazo.
Gracias Flor.
Feliz fin de semana.
Un fuerte abrazo.
Cierto, querido Javier... Muchas veces he pensado lo mismo ante la actitud indiferente del otro... Pero en realidad hemos de dar sin esperar nada a cambio... esa es la Generosidad en pequeños detalles que vamos desarrollando. Dar amabilidad, respeto, sonrisas... calidez...candidez.
A veces me he sentido como una niña... esa candidez que parecía desubicada en nuestro contexto social...
Gracias... esas peueña cosas en nuestra vida ordinaria apunbtan a nuestro interno entrenamiento y fluidez a la vez.
Feliz semana, querido Javier... y una sonrisa en la distancia desde la candidez del corazón de mi Alma.
Gracias Sabrina.
Pasaré por tu blog.
Un saludo cordial.
Gracias querida Carmen, tus aportaciones iluminan cada post de este blog.
Un fuerte abrazo.
Hola.... te mando un saludo y un abrazo. Meditar por ese hombre es un acto de generosidad, bondad y amor.
Tu gesto fue noble y también el recordarle en tu meditación. Hay personas que pasan de largo ante cosas tan bellas como un saludo. ¡qué le vamos a a hacer!
Gracias Mª Jesús, es lo que hay que hacer.
Un abrazo.
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